(después de haber mirado
la herida en tu memoria
después de ver tu llanto
salinidad electrónica en pantalla
después de romperme el esqueleto
leyendo tus palabras desgarradas
después de tu voz articulando
el nombre de tu hermana:
“Sofía. Operación el miércoles.
Me necesita. “
después de tu “Puta madre.
¿Qué hago? Nada. No puedo hacer nada”
después de mirarte en el derrumbe
del universo personal y otros demonios
después de la visita clandestina
a tus fantasmas personales
después de haberte visto
la herida en el costado
después de descubrirte
tan frágil, vomitando a solas en el baño
todo el amor y todo el miedo
después de quedarme sin respuestas
para tus preguntas de niño
que descubre que dentro algo le cruje)
me doy cuenta
de que me duele mucho más
el fin –probable- de tu mundo
que el probable fin del mundo.
Zaría Abreu.
oye poeta influyente, sería posible poner la letra del blog un poco más grande? se pasa mucho trabajo pa leer porque la letra está chiquita y el amarillo con el azul aunque se ve bien bonito come un poco la vista...
ResponderEliminargracias!
¿?¿? sobre lo de la letra.
ResponderEliminarZaria: quería dejar constancia en este espacio que sos una DIOSA, me encantó este poema como no tenés idea. Te admiro mucho.